¡Cuántas veces hemos oído eso de que “sin amor no hay buen sexo”! Mentira cochina, vamos. Llevo 15 años escribiendo sobre relaciones y contactos de sexo, y si algo he aprendido es que cada persona es un mundo.

Mi amiga Laura, sexóloga del Centro de Salud Mental, me contaba el otro día entre risas: “Mira, el amor y el sexo son como el gin y el tonic. Están buenísimos juntos, pero también puedes disfrutarlos por separado”.

¿Química o Sentimientos?

El viejo Severo Ochoa no iba tan desencaminado cuando soltó aquello de que “el amor es física y química”. ¡Y tanto! Nuestro cerebro es como una discoteca cuando nos enamoramos:

La dopamina nos hace bailar de alegría

La serotonina nos pone de buen rollo

Las endorfinas… ¡madre mía, las endorfinas!

Y la noradrenalina nos acelera el corazón

Pero ojo, que esto pasa tanto cuando nos enamoramos como cuando echamos un polvo casual. La química no distingue entre amor y deseo, somos nosotros los que le ponemos etiquetas.

Amor con Sexo, Sexo sin Amor…

El otro día en la consulta (soy terapeuta además de escribir estas columnas) me llegó una pareja preocupadísima porque su vida sexual había bajado de intensidad. “¿Y qué tal os lleváis?” les pregunté. “Mejor que nunca”, me contestaron. Pues eso.

Hay quien tiene sexo como quien va al gimnasio: para mantenerse en forma. Otros hacen el amor como quien reza: con devoción y entrega. Y sabéis qué? Los dos están en su derecho.

El Deseo, ese Bicho Raro

Como decía Lacan (que de esto sabía un rato), el deseo viene del inconsciente. Por eso a veces nos ponemos cachondos con quien menos esperamos, o nos enamoramos de quien no nos atrae físicamente. El cerebro tiene estas cosas.

¿Y Qué Hay de las Parejas?

Vamos a ser sinceros: una relación empieza con fuegos artificiales. Todo es pasión, todo es sexo, todo es “no puedo vivir sin ti”. Pero luego la cosa evoluciona. Como el buen vino, algunos dicen. Como la leche cortada, dicen otros.

Lo importante es:

• Que haya respeto mutuo
• Que cada uno sepa lo que quiere
• Que nadie engañe a nadie
• Que la autoestima no se vaya al garete

El Sexo en Casa

¡Cuántos mitos hay sobre esto! Que si hacer el amor es más bonito, que si el sexo casual es más excitante… ¡Pamplinas! Como me dijo una vez mi paciente Marta: “A veces follo con mi marido y otras le hago el amor. Y las dos cosas están de muerte”.

La Diversidad es la Clave

Heterosexuales, homosexuales, demisexuales, asexuales… ¡Hay más orientaciones que sabores de helado! Y todas son igual de válidas. Lo importante es ser honesto con uno mismo.

Para Terminar…

Después de tantos años escuchando historias de amor y desamor, de sexo bueno y malo, de pasiones y desengaños, solo puedo decir una cosa: no hay una fórmula mágica.

Algunos necesitan amor para disfrutar del sexo. Otros disfrutan del sexo sin necesidad de amor. Y ambas opciones son perfectamente válidas mientras sean honestas.

Como dice mi abuela (que de esto sabe más que nadie): “En el amor y en el sexo, como en la cocina: cada uno que se lo guise como mejor le sepa”.

Y tú, ¿de qué equipo eres? ¿Amor y sexo juntos o por separado?

PD: Si alguna vez os sentís raros por vuestras preferencias, recordad que lo único verdaderamente raro es pretender que todos seamos iguales.